Aprender a jugar Poker

Trataremos de resumirte de la forma más concisa posible las reglas básicas que componen este apasionante juego. Una vez que logres conocer los mecanismos que componen las diferentes etapas y logres introducirte paulatinamente en sus delicados y atrapantes secretos, comenzarás a jugar y podrás disfrutar de sensaciones indescriptibles.
Las reglas son muy sencillas y lograrás aprenderlas muy fácilmente, si estas acostumbrado a jugar otros juegos de cartas. Luego podrás conocer y desarrollar determinadas estrategias en tu juego, para mejorarlo y perfeccionarlo gradualmente, hasta convertirte en un verdadero profesional del Poker.
A partir de este punto, desarrollaremos algunos breves capítulos describiendo las reglas básicas del Texas Hold’em. También hablaremos de las manos iniciales, de las apuestas y en que momento se hacen, y te comentaremos algunas estrategias que deberás tener en cuenta para llegar a ser un jugador exitoso.

Reglas básicas, manos iniciales y apuestas

El mazo de la baraja constará de 52 naipes, y cada jugador contará con 5 cartas para formar su juego o mano.
Para comenzar, en una ronda de juego siempre debe haber un Dealer (o repartidor)  que también será un jugador más. Este repartidor será el último en jugar en cada ronda, y el primero en hacerlo será quien esté sentado a la izquierda del Dealer. Al comienzo de una nueva ronda, se rotará la posición del repartidor, y será el jugador sentado a la izquierda de quien repartió cartas en la ronda anterior, quien asuma ahora la tarea de repartir cartas. La posición del Dealer (para evitar confusiones), se identificará colocando un botón o ficha circular frente a éste.
Con las apuestas que realiza cada jugador se va formando un pozo, llamado bote o pote, que constituye el premio que obtendrá el ganador final.
Como parte de la modalidad Texas Hold’em, dos jugadores serán los que comiencen con las apuestas aun antes de repartir cartas. Estas dos apuestas son obligatorias y definitorias de lo que sigue. El primero será aquel que esté sentado a la izquierda del repartidor, y hará la primer apuesta llamada “ciega pequeña” (small blind). El segundo en apostar será el que esté sentado a la izquierda de éste ultimo, su apuesta será el doble de la anterior y se le llama “ciega grande” (big blind). Es decir, que si la ciega pequeña fue de una unidad, la ciega grande será obligatoriamente de dos unidades, y a partir de esta las siguientes apuestas serán de dos unidades en cada mano.
En caso de jugar con límites, el mismo quedará fijado por la ciega grande.
Recién ahora comienza el reparto de cartas, que se hará también en sentido horario, y se entregarán dos cartas cubiertas a cada jugador, que sólo el podrá ver. Este momento conocido como pre-flop es utilizado para efectuar las apuestas que como mínimo igualarán a la ciega grande. Aquel que decida no apostar será considerado como retirándose de esa mano.
A continuación, se colocarán tres cartas descubiertas sobre la mesa (este es el momento conocido como flop), y se podrá realizar una de cinco acciones posibles: apostar (bet), pasar (check) mientras nadie aumente la apuesta anterior se puede seguir en juego, aumentar (raise) y estaremos desafiando a los demás jugadores a que nos igualen o quedarán fuera, igualar (call) para mantenernos en juego sin ningún alarde, o retirarnos (fold) cuando pensamos que no tenemos chance de nada, nos quedamos sin fondos, o no queremos arriesgarnos a perder todo lo que nos queda.
Al concluir esta vuelta de apuestas, cada jugador recibirá un cuarto naipe también descubierto (turn) y nuevamente se apostará, igualando o elevando la apuesta, pasar si es que nadie aumentó, o retirarnos si creemos que todo está perdido.
A continuación viene el momento en que se voltea un quinto naipe (river), y aquí tendremos que elegir la acción a tomar considerando la mejor combinación que se pueda formar con las dos cartas en nuestro poder más las cinco de la mesa. Esta combinación nos permitirá apostar por ultima vez, y teniendo en cuenta cual es la mayor apuesta hasta el momento, podremos igualarla, aumentarla o retirarnos.
En el momento en que ya nadie aumente su apuesta, se dará por terminada esa ronda y se mostrarán los juegos de quienes hayan permanecido jugando hasta ese instante (showdown). Si un participante realizó un ultimo aumento y nadie igualó su apuesta, será el ganador de la partida y no estará obligado a mostrar su juego. Si hubiera un empate de apuestas, se deberán mostrar las cartas de cada juego para determinar el ganador.

Algunas estrategias del juego

Básicamente para ganar un juego debes tener las cartas más altas o la mejor combinación posible de ellas. Además de las mejores cartas, o las más  apropiadas, también necesitarás contar con otros atributos muy personales como: actitud frente al juego y a tus adversarios, control permanente de tus gestos, emociones y posibles tics evitando que puedan delatar tu juego o dar pautas de comportamiento que ayuden a descifrar tu forma de accionar. Por último, y no menos importante, deberás aprender a mentir en algunas ocasiones, para inducir a tus contrincantes a pensar que tienes un determinado juego cuando puede ser todo lo contrario.
Estas mismas técnicas deberás utilizar cuando quieras estudiar a cada uno de tus oponentes o sus formas de juego, para sacar partido de ello.
Debes recordar siempre que una de tus habilidades en este juego será ocultar tu buena o mala suerte con las cartas que te han tocado, y el saber mentir para disimular o engañar a tus adversarios y revertir alguna situación.
Cuando tengas un buen juego en tus manos, debes evitar la tentación de hacer una apuesta muy fuerte ya que podrías estar asustando a tus oponentes y hacer que se retiren, mientras que si te mantienes con un bajo perfil, hasta pasar de igualar en alguna ocasión, podrías lograr que el otro suba su apuesta y  luego si atraparlo. Para evitar que te crean algo inseguro, en lugar de pasar puedes aumentar levemente tu apuesta.
Otro tipo de estrategia es la de subir tu apuesta una mano tras otra, dando a entender que siempre tienes buenas cartas, así irás despejando la mesa hasta llegar a un ‘mano a mano’ con otro jugador, y terminar haciendo una apuesta que no deje dudas acerca de tu voluntad de arrasar con el.
Si tienes un juego en tus manos que no te deja ninguna duda de que puedes ganar, debes tratar de no auyentar a tus oponentes y lograr que aumenten sus apuestas para que tu ‘cosecha’ sea buena. Aquí lo importante es el equilibrio de tu parte, si tus apuestas son muy pequeñas o muy altas puedes despertar sospechas. El punto central de tu juego será tratar de descifrar el interés de los otros jugadores en seguir jugando esa mano, y despertar ese interés.
A continuación, deberás tener en cuenta las estrategias según determinados niveles de pensamiento. El nivel más elemental es el que considera simplemente que o cuales combinaciones de cartas puede ganar a las cartas que poseo en este momento.
El segundo nivel consiste en evaluar como se han comportado mis adversarios y que cartas creo que pueden tener. Por supuesto, esto es difícil y no muy exacto, pero es bueno intentarlo basándonos en datos de jugadas anteriores.
Un tercer nivel algo más complejo, es aplicar un razonamiento similar al de un jugador de ajedrez tratando de acertar cual sería la, o las, jugadas que haría mi oponente respondiendo a determinada jugada mía. Si hemos conseguido encontrar algo parecido a un ‘patrón de juego’ de nuestro oponente, podremos vencerlo seguramente.
Otros niveles de pensamiento pueden llegar a ser más complicados aun, y el razonamiento estaría enfocado a determinar: ¿que es lo que mi oponente cree que yo pienso que el tiene como juego?.
Por supuesto que toda otra estrategia o táctica que logre nuestros objetivos debe ser considerada como válida y aplicada en consecuencia.
Good Luck !